Fuentes del hospital San Martín señalaron que este último tiempo se incrementó el número de pacientes que llega al nosocomio en estado de shock a causa del consumo de bebidas energizantes mezcladas con alcohol.
Las llamadas bebidas energizantes son la vedette de moda entre los adolescentes. Aunque se trata de bebidas legales, mezcladas con líquidos de alto contenido alcohólico, como vodka, la ingesta provoca un cóctel explosivo, cuya consecuencia en el consumidor es una total falta de control de sus actos, además de adicción y deterioro cerebral. El consumo de este tipo de bebidas creció a pasos agigantados en el país, y Paraná no es la excepción.
Las marcas más conocidas son Speed, Red Bull o Rocket Fuel, estas bebidas son muy ricas en cafeína, son adictivas y alteran el sistema nervioso.
Patricia Caro, toxicóloga y bioquímica forense e integrante de la Fundación Ave Fénix, orientada a la prevención de la adicción a drogas dijo que desde la entidad se llevó a cabo, en 2004, una campaña mediante la cual se pidió que se reglamente la venta de energizantes mezclados con bebidas alcohólicas pero no dio resultado. En este contexto, y teniendo en cuenta el peligro que implica el cóctel lamentó la negativa.
Según manifestó â??en Paraná pasa lo mismo que en el resto del país. Se creó un comercio de esto y es difícil luchar para que no preparen las bebidas con alta graduación alcohólica con bebidas energéticas. A los chicos les están metiendo vodka con la bebida energética y salen totalmente locosâ?, expresó la entrevistada señalando que de allí surge el incremento de accidentes de tránsito a la hora habitual de salida de los boliches bailables, y también el aumento de los episodios de violencia.
Caro hizo referencia a que al momento de ingerir el trago, los chicos no tienen en cuenta que este tipo de bebidas tienen una altísima dosis de cafeína, y que por eso generan adicción.
El cálculo estimativo de la entrevistada es que la mayoría de los adolescentes consumen por lo menos dos vasos de tragos energéticos por noche, cuando salen a bailar. â??Si están muy caros en el interior del local, consumen una lata antes de entrar y otra al salirâ?, señaló.
En cierta manera, se está volviendo al consumo de sustancias lícitas, algo que no se daba de manera masiva desde la década del 80, cuando se tomaban fármacos de base opiácea, como broncodilatadores, psicofármacos y analgésicos.
â??Aumenta porque se está popularizando entre los chicos. A los adolescentes cualquier cosa que se les de con promesa de alegría y diversión les llama la atenciónâ?, reflexionó la entrevistada.
En este contexto, Caro criticó las publicidades que surgen de los distintos medios de comunicacióne indicó que promueven el consumo de este tipo de bebidas. Al hablar de edades, señaló que la franja consumidora son en su mayoría los jóvenes.
Confirmando las declaraciones de Caro, fuentes del hospital San Martín señalaron que este último tiempo se incrementó el número de pacientes que llega al nosocomio por un estado de shock a causa del consumo de bebidas energizantes mezcladas con alcohol.
En este contexto, señalaron que muchos llegan agresivos y relacionaron algunos accidentes de tránsito con esta cuestión. Y especificaron que la mayoría de las personas que ingresan por esta causa tienen de 15 años en adelante.
â??El energizante los deja mal, quedan perdidos. A diferencia de los borrachos comunes, no se acuerdan de cosas básicas como por ejemplo dónde queda su casaâ?, señaló un agente de la guardia a diario Uno.